El tráfico aéreo en Austria viene determinado, por una parte, por su situación central en Europa y, por otra, por el pequeño tamaño del país y la fuerte competencia aérea de los países vecinos. Como consecuencia, sólo hay unos pocos aeropuertos grandes en Austria. Viena es el mayor de ellos y sirve de centro de conexiones para los vuelos a Europa del Este y Oriente Próximo. Si planea visitar las regiones occidentales de Austria, Tirol, Salzburgo, Vorarlberg, Zúrich o Múnich son sus aeropuertos de llegada. Los aeropuertos de Salzburgo, Graz, Innsbruck, Linz y Klagenfurt completan la red de tráfico aéreo, pero sirven principalmente destinos nacionales y europeos.
Austrian Airlines, ofrece vuelos cómodos y una excelente conectividad en toda Europa y más allá. La duración de los vuelos es casi idéntica a la de los vuelos a Viena. ÖBB, los Ferrocarriles Nacionales Austriacos, ofrecen conexiones ferroviarias directas desde Múnich y Zúrich a cualquier ciudad importante de Austria.
Los grandes aeropuertos, como los de Múnich, Fráncfort y Zúrich, están situados a una distancia relativamente corta de Austria y ya prestan servicio a segmentos de mercado similares con mayores capacidades y una gama de servicios más amplia. Estos aeropuertos atraen por tanto una parte importante del tráfico aéreo internacional, que Austria no ha podido atender con sus aeropuertos hasta la fecha.
Los grandes aeropuertos austriacos de Viena, Salzburgo, Innsbruck, Graz, Linz y Klagenfurt, entre otros, garantizan que el país esté bien conectado nacional e internacionalmente.